Publicado en reflexión, relato, Sin categoría

Micro III


El Raciocinio, muy creído él, de si mismo, crecido de tantos siglos a sus espaldas, siendo referente del conocimiento, no se le ocurrió otra cosa que meterse con su compañera la Inteligencia; alegando que, sin todo lo escrito sobre él, ella no tendría nada que hacer por muy lista que se creyera. Ella, que era mucho más tranquila y siempre gustaba de pasar desapercibida para aprender sin entrometerse; en esta ocasión, tuvo que dar réplica, a tan pretencioso personaje.

Mira querido —dijo ella, sin darse importancia pero pronunciando, con exquisitez, cada sílaba— todo lo que en los libros se dice de ti y del que, tanto eco te gusta hacerte, es gracias a que, en los primeros tiempos, Nos, enseñamos a los humanos a escribir sus pensamientos con caracteres sencillos. Todos ellos podían aprenderlos e identificarlos y, así, compartirlos.

Los razonamientos solo son rutinas ciegas si no hay una inteligencia que les guie.

Autor:

La imaginación nos brinda todo aquello la vida nos pueda negar y más...

22 comentarios sobre “Micro III

  1. Me ha encantado!! Creo que el razonamiento es el hijo de la inteligencia, entre otros muuuchas motivos por el hecho de que es un rasgo de la segunda el cuestionarse las cosas. Sin embargo puedes ser muy inteligente pero, como se dice en Mallorca, no ser «viu» (es algo así como ser listo aplicado al día a día)😉

    Le gusta a 2 personas

    1. Pues sí, la madre del saber aplicado es la inteligencia. Ser listo te permite resolver los problemas que conoces, los inteligentes saben encontrar soluciones, o al menos buscarlas, a lo que desconocen.
      Saludos mabm 🙂

      Me gusta

              1. ¡Ay! Tunante.
                Que a mi no me la das.
                Se que te gusta el buen yantar.
                Solo hay que ver tus fotos en instagram.
                Como te gusta arrimarte a quien el estomago te pueda llenar.
                Si es de un buen jamón ibérico acompañado de zumo de la cebada,
                no lo quieres dejar escapar.
                No eres el lazarillo,
                ese del que hablan los libros,
                pero hay que reconocer,
                que nada le tienes que envidiar.

                Le gusta a 1 persona

                1. Que bien nos entendemos
                  los que somos de la misma condición.
                  No nos importa que, por memos
                  nos tomen, si generosa es la ración,
                  de manjares que satisfagan
                  nuestra sabrosa imaginación.
                  De los que nos halagan,
                  llenos de palabras y vacío
                  el plato, no me confío
                  que solo les va el vicio
                  de dar coba, y les porfío.
                  De comer no vamos a discutir
                  ni de quien en las redes seguir.
                  Ambos sabemos bien deglutir
                  y a los instagramers distinguir.

                  Le gusta a 1 persona

  2. Muy bueno! Qué se pensaría el raciocinio! jajajaja Lo malo es que para ser efectivos deben trabajar mano a mano… Espero que sus desavenencias no acaben mermando nuestras facultades… jajajaja 🙂

    Me gusta

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.