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La importancia de los blogs personales

Los mensajes en las botellas ahora se llaman blogs personales

Pues sí, escribir al éter de Internet, sin pretensiones ni ganas de fama, solo expresándose como se hablara con uno mismo, es una terapia de personalidad tan barata como efectiva. Ayuda a practicar la escritura, eso que nos enseñaron en la escuela, con su ortografía y su gramática, que muchos hemos ido perdiendo por el desuso. Sí, porque nosotros sabemos lo que tenemos en el coco, pero explicarlo con palabras y que otra persona pueda entenderlo, no es tan sencillo.

Hay algo más importante todavía, nos da autoestima, al vernos capaces de decir lo que pensamos por nosotros mismos, sin que nos lo saquen con preguntas que nos incomoden, al tomarnos la iniciativa. Otro punto que nos refuerza esa confianza es ir perdiendo ese miedo a lo desconocido de quien nos pueda leer o criticar o insultar, es nuestro blog y tenemos el control sobre todo eso.

Luego vienen los frutos, al final siempre hay alguien que te lee, gente afín a lo que dices que te sigue para estar al día de tus publicaciones y, por último, respuestas a tus comentarios. Esta interactividad mantiene el interés en seguir compartiendo impresiones, reflexiones o recetas de cocina; da igual, todo es opcional y gratis, el equilibrio perfecto.

Así que objetivo cumplido. Leemos, nos leen, opinamos sobre lo suyo, opinan sobre nuestro y, al día siguiente o cuando nos apetezca, seguiremos compartiendo y siendo compartidos.


Publicado en música, Micros, Re.

Escribir Jugando. Abril ’24

Escribir Jugando Abril 2024

Un ladrón de pluma blanca

CartaDixitDadosStory Cubes Fantasía.

Aquella apuesta era un cheque al portador para alguien que acaba de salir de la jaula y cuya balanza económica eran unos escasos 17,42 €.


En la cárcel los ladrones de guante blanco eran la aristocracia, pero el caso de este sujeto era singular al dejar una pluma blanca, de paloma o gaviota, según fuera su estrambótico golpe.


En los cepillos del obispado, usaba la de paloma para recordar a la iglesia su falta de humildad. La de gaviota, en los cajeros automáticos, por ladrones.


Ahora, disfrazado con una sotana, conseguiría el premio gordo en las habitaciones del mismo obispo.

(100 palabras)