
Yo en tu fiesta me colé pero de día me equivoqué
Sí es que soy imbécil solo a mí se me ocurre venir a esta fiesta que no era la mía y encima con el estómago vacío.
Últimamente todos los meses, bien un día u otro acudo a la sala Fantépica a ver la puesta en escena programada. Como no lei la cartelera de este mes no me enteré que el último día era el veinticinco.
Bueno pues yo me acerqué el veintiséis, viendo que se me iba a terminar el mes, todo apresurado. Tanto que llegué sin cenar ni picar algo por el camino siquiera al evento.
La primera sorpresa fue el escenario, no tenia nada que ver con las decoraciones del tipo fantástico o mitológico de veces anteriores. En su lugar unos densos y oscuros cortinones de terciopelo cubrían todas las paredes. Aquello parecía la entrada a un inframundo, máxime cuando los allí presentes todos iban con máscaras y ropajes de otra época.
No me amedranté y para integrarme un poco me abroché hasta el botón del cuello de la camisa, me puse las gafas de sol y me cruce el bolso. El caso es que no veía ni para jurar pero con el hambre que tenía me acerqué a una mesa donde me pareció ver canapés y más chingadillas para picar.
En una mesa larga, muy bien presentada donde había gran cantidad de platos con bolitas y trocitos como de paté. Todo ello bien numerado como si fuera una cata de entrantes de un catering. El caso es que al no ver a nadie por allí y con los rugidos del estómago no me costó mucho empezar a picar algo de cada plato.
Los sabores no eran malos pero sí distintos a lo que estaba yo acostumbrado. Pero el hambre no me permitía ponerme muy tiquismiquis. Al cabo de un rato y ya saciado, una sensación de empacho nauseabundo, me hizo ir corriendo a los servicios que sabia que estarían por el fondo.
Para aumentar más mi fatiga, justo a la entrada de los WC había un grupo de gente hablando. Y por más que intenté contenerme, ya sin tiempo para esquivarles, no pude evitar chorrear con un intenso vómito, a los que más cerca tenía. Sin disculparme, por la premura que llevaba, me encerré en uno de los aseos a terminar la faena.
Aquello fue épico, lo mismo echaba por la boca que evacuaba por la retaguardia. Creo que todo lo que había comido en la última semana salió, bien por uno o por el otro sitio. Al cabo de una hora creo que ya volví a ser mínimamente persona y no una incesante alcantarilla humana. Parece mentira toda la porquería que llevamos dentro, joder si hasta el pantalón me quedó flojo.
Me arreglé un poco en el lavabo y, si no fuera por las gafas negras, de la palidez se me confundiría con los azulejos. Medio fantasma y medio zombi me dispuse a salir hacía la fiesta de máscaras. De fondo se oía al micrófono un animador hablando, su voz se iba haciendo inteligible a medida que me acercaba a la sala. Ahora empezaba a entender, yo me colé antes de empezar el evento; de ahí tanta oscuridad, y como ya es carnaval, de ahí también la ropa y las caretas.
Vaya, ahora había mucha más luz en el recinto y los cortinones descorridos dejaban ver enormes carteles publicitarios de comida para mascotas. Mi última sorpresa fue cuando dos enmascarados, cada uno como el doble que yo, me cogieron por los hombros y como un emparedado me sacaron; eso sí, amablemente empujándome como un metro fuera de la entrada. De fondo seguía el locutor comentando las virtudes de las bolitas para perros y los patés de gatos.
Una pareja de trajeados del siglo antepasado con la careta sobre la frente fumaban y juraban en alto. Igual el motivo de su enfado eran los grandes lamparones que sus ropas llevaban. Por su olor yo juraría que era vomitona de perro, así que al pasar junto a ellos dije un adiós muy cortes y empecé a alejarme con paso muy ligero. Creo que de refilón vi a la mujer mirándome fijamente, como si me reconociera, pero yo no me volví a comprobarlo.
Fdo. El Percebe 26 de febrero de 2020
esta claro no se puede ir en ayunas, después pasan estas cosas, enhorabuenas
Me gustaLe gusta a 1 persona
A estos eventos deprisa y corriendo no se puede ir y encima con el estómago vacío. Gracias por tu visita comentada, un saludo 🖐️
Me gustaMe gusta
Pues yo tengo entendido que las bolitas para perro están ricas.🦴🦴🦴🐐🐐 jajaja
A ver si es que te diste un atracón y eso fue lo que causó tal dislate.
Y menos mal que no llegaste a probar la comida para serpientes🐭🐭
Me gustaLe gusta a 1 persona
Con el hambre que tenía hasta los bichejos secos de los peces de colores me habría comido igual que las semillas de girasol.
El paté de los gatos si tuviera algo de sal tendría su punto también 😹😹🖐
Me gustaMe gusta