Hay temas musicales, sobre todo conocidos o populares, que tienen diversas o muchas versiones y alguna de estas resulta tan imprescindible o más que la original o más conocida.
La primera que voy a poner es una muy conocida de Sting: «Fields of Gold» en la versión de Eva Cassidy. El gusto que le pone a esta canción la malograda cantante roza y toca la perfección, se puede escuchar cien veces seguidas y en cada una de ellas seguir sintiendo la profundidad de la interpretación, como si de una una suplica o plegaria se tratara.
Sobre gustos, lógicamente, no vamos a discutir pero, honestamente, estoy convencido que quien prefiera la versión original no desechará, para nada, la interpretada por Eva.