

El viejo de la habitación catorce
Aquella, ya lejana, mañana lo encontraron, su rostro de felicidad disimulaba la frialdad de la muerte. Sin familia ni visitantes, cada tarde a los desamparados como él, narraba sus sueños adolescentes; cuando secretamente, en un claro del bosque, se veía con la hija del terrateniente.
Sus nonagenarios camaradas subían el volumen de los audífonos, para no perderse detalle de esos recuerdos tan viejos como nostálgicos; llegando a sentir, por la emoción, música de liras celestiales.
Las flores de la habitación catorce ese día también se marchitaron. Las Madreselvas cumplieron bien su misión, pero cuando sentimos nostalgia todavía percibimos su aroma.

100 palabras justas más el título
¡Los relatos de los abuelos! puede que parezca que chochean pero los recuerdos más vívidos están ahí latentes, esos no se olvidan.
Un abrazo.
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Seguro que en lo que contaba había más de su cosecha e imaginación que de lo que realmente sucedió, pero seguro que en cuanto lo que sentía al recordarlo ahí todo sí que era real.
Saludos, Virtudes. 🖐🏼
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No es ñoño, es triste y real, como al vida y el paso del tiempo. Me parece una bonita metáfora de la fugacidad de la vida. Gracias por tu aporte al desafío de este mes. Un abrazo.
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Ves, yo difiero. La nostalgia no es tristeza, ni tampoco melancolía o angustia, son esos recuerdos que nos mantienen vivos los sentimientos más profundos y reconfortan cuando la única compañía es la Soledad.
Saludos y hasta ya mismo que se acabó noviembre. 🖐🏼
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Una historia corta y bonita que nos deja con ganas de más. Buen día vecino.
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Hola, Mar. Déjate de más, ya me seque la neurona con los relatos de las invasiones y ahora lo pago hasta sin responder a los comentarios.
Yo lo veo más nostálgico que triste y forma parte de nosotros precisamente para combatir La Soledad y su hermana La Angustia. 🖐🏼
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Relato triste, a la vez que tierno y bello. Deberíamos prestar mucha más atención a nuestros mayores. Nos olvidamos que algún día también lo seremos nosotros. Me ha gustado tu relato. Saludos!
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Precioso relato, JM.
Poético, dulce, romántico, ¿triste? Más bien realista. Muestras una realidad demasiado cercana y que da más miedo que la misma muerte.
Cuando eres adolescente ansías cumplir años para vivir solo y alcanzar la independencia, pero cuando ya eres adulto, temes cumplirlos porque te encaminas irreversiblemente hacia la Soledad no buscada.
Felicidades, un abrazo espumoso.
☺️🤗🍻🍻🍻
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Bueno, JA. Ya he acabado los dos desafíos cortos que caducaban con el mes, el tuyo ahora mismo aunque a medio corregir ya publicado también está. Ahora me queda leer vuestros aportes, pero para eso, afortunadamente, no hay fecha de caducidad. 😂
Sí, que con lo de la edad la velocidad cambia radicalmente. Primero las prisas nos hacen pensar que el tiempo no corre y ahora los años pasan casi sin enterarnos. Al menos, la experiencia nos va enseñando a navegar según las condiciones de la mar.
Saludos y cerveza 😁🖐🏼🍻🍻🍻
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La edad enseña que, entretener el tiempo, es más útil que ponerle zancadillas. Son cosas que pasan. Un saludo.
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Ese gráfico ejemplo no precisa de explicación salvo para los jóvenes o los que para todo tienen prisa.
Saludos, Carlos. 🖐🏼
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Poético relato, JM, que nos lleva a una realidad que intentamos evitar pero no es posible.
Un abrazo
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Hola, Lola. Me alegro de que te lo haya parecido. La línea de la nostalgia y la tristeza a veces no queda bien definida en nuestros recuerdos. En este caso creo que la sonrisa de sus labios nos da la pista. Saludos 🖐🏼
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Un relato entrañable y muy acertado. De justicia es darle protagonismo a nuestros mayores poseedores de un gran bagaje de vivencias de primera mano con las que podemos aprender. A nosotros nos corresponde prepararnos para que el paso del tiempo no nos sorprenda con los cambios que nos impone y, a ser posible, desconcertarle a él; como le sucede al protagonista de tu micorrelato que, a pesar de transitar hacia el elotro lado, lo hace feliz después de haber deleitado a sus compañeros contándoles sus historias.
Gracias por compartirlo.
Saludos.
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Hola, siento contestarte tan tarde. Veo que has captado hasta más de lo que pensaba yo que transmitía el micro.
No puedo por menos que coincidir con tu exposición. Yo también creo que ese es el camino y la nostalgia la luz que en los momentos más difíciles nos alumbre en nuestro camino por la vida. Saludos y gracias a ti por comentar. 🖐🏼
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