Micro XXV


Me acabo de comprar un sombrero
para saludarte, con él, al verte llegar.
No me lo pienso quitar ni de noche
ni, por supuesto de día, mi amiga.

Tu añorada presencia, buena señora,
ha sido mi castigo y sufrimiento diario.
Sin ti no soy nadie ni nada que merezca
ser pensado, ni dicho; ni, claro, escrito.

Buena mujer, sin tu amparo ni compañía,
solo soy un ser mediocre y nada afortunado.
Bienvenida seas, mi Musa, en cada mañana,
en cada tarde, o cualquier momento del día.

Mi Musa

10 comentarios sobre “Micro XXV

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.